El gigante informático Google ha ofrecido a la Comisión Europea medidas correctivas, en particular cambios a la forma de presentación de los resultados de las búsquedas realizadas en su buscador para no privilegiar sus propios servicios frente al de los rivales, con el fin de librarse de una fuerte multa por abuso de posición dominante.
Uno de sus ejecutivos nos han anunciado que someterán estas propuestas a un test de mercado durante un mes para conocer la opinión de las compañías que han presentado quejas contra Google y de todas las partes interesadas. Bruselas examinará en particular si los compromisos necesitan mejorarse para abordar las preocupaciones en materia de competencia identificadas
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Si el resultado del test de mercado es positivo, la Comisión convertirá los compromisos en jurídicamente vinculantes y archivará la investigación contra Google sin sanciones. Un experto independiente verificará que la compañía cumpla. En caso contrario, seguirá adelante con el expediente sancionador.
En particular, Google ha ofrecido a Bruselas etiquetar, en los resultados de las búsquedas, los vínculos hacia sus propios servicios especializados (como Google Shopping, Google Hotel Finder, Google News, Google Finance or Google Flights), de forma que los usuarios puedan distinguirlos del resto.
Estos resultados preferentes aparecerán claramente separados del resto mediante un grafismo claro, por ejemplo un recuadro. Además, Google se compromete a ofrecer tres resultados de servicios de búsqueda especializados, cerca de sus propios servicios y en un lugar claramente visible para sus usuarios.
El gigante informático ofrecerá a todos los sitios web la posibilidad de rechazar que se utilice todo o parte de su contenido en los servicios de búsqueda de Google, garantizando que con ello no afectará indebidamente a la clasificación de estos sitos en las búsquedas generales.
Por lo que se refiere a los editores de periódicos, Google propone un mecanismo que les permitirá controlar la aparición de su contenido en Google News.
La empresa estadounidense ya no podrá insertar en sus acuerdos con los editores ninguna disposición escrita o no escrita que les obligue a contratar su publicidad contextual por Internet, únicamente con Google. Y no podrá prohibirles gestionar campañas publicitarias contextuales en diferentes plataformas publicitarias rivales. Estos compromisos cubren con el espacio económico europeo.